La educación consciente empieza en el embarazo.

El embarazo es un estado bidireccional. La mamá afecta al bebé y el bebé afecta a la mama.  El mundo alrededor genera cambios en la mamá y el bebé y ellos, alteran y cambian el curso del mundo que les rodea.

Durante la gestación, mientras se crea el campo físico del bebé, las influencias energéticas, memorias, propósitos con los que el bebé nace empiezan a tocar su materia. Al tiempo que lo hacen y, depende de lo sensible que sea la madre, empezarán a alterar su carácter y sus gustos y actitudes de un modo más o meno intenso según su naturaleza, y de un modo más o menos consciente según su conciencia .

Cuando escucho cosas como: claro es que se pasó todo el embarazo nerviosa cómo no va a ser nervioso el niño… me pregunto si somos conscientes de cuán limitada es nuestra visión. De que nos estamos refiriendo tan sólo a lo que hemos podido ver en una línea de tiempo muy limitada. En un espacio vital de 9 meses dentro del espacio vital de varias vidas. Una afirmación así podríamos darla si conocemos la linea de tiempo del bebe en todas sus manifestaciones.  La línea de tiempo de la madre en las mismas circunstancias, el contexto sociocultural y emocional en que se realiza la gestación y un largo etc de variables.

Lo que nos queda por lo tanto es abrir nuestras mentes y observar y observar y sentir y no etiquetar. Saber que mi punto de vista puede ser ignorante abre mi mente a nuevas perspectivas

Sea lo que sea, el niño es nervioso. Y habrá que ver si la madre ya lo era antes, si lo siguió siendo después… y seguir observando y en cualquier caso escuchar esos nervios y ver qué puede equilibrarlos. ¿Y sabes qué? Hay cosas que incluso sin culpables se arreglan, incluso me atrevería a decir que más rápido. Que si le cuelgo el muerto a alguien pues lo mismo me parece que ya está resuelto y lo doy por zanjado.

No sólo los aspectos que vivan ambos afectan a la mama y el bebé. También las resistencias que tenga el árbol a hacerle hueco al nuevo participante. La rigidez de las creencias, la dificultad de integrar en el propio árbol a la madre o al padre y con él al nuevo clan. Las memorias compartidas que cada clan tiene en la línea de tiempo de todos sus ancestros.

Qué ridículo suena todo esto  desde la mente parcial y concreta… que el ser humano es un todo debe partir desde el principio y dejar el espacio para que lo mente lo sepa

Antes los rituales de pedida, matrimonio, acuerdo entre familiares etc permitían que todo el árbol integrara a la nueva familia. Los clanes se unían.  Para cuando llegaban los hijos ya había un trabajo hecho. Ahora, puesto que vamos hacia otros lugares como humanidad y nos toca salir de la supervivencia y de la familia de Sangre y caminar hacia la conciencia de unidad y trascendencia de la muerte, las cosas están cambiando. Prescindimos de los ritos en la mayoría de los casos, no sostenemos lo políticamente esperado o correcto y el trabajo energético en el embarazo es más intenso.

Qué duda cabe que toda intensidad o dificultad tan solo aumenta nuestras capacidades. Así que digamos que estamos preparados para lo que nos toque vivir y hagámonos grandes. Pero hagámoslo con conciencia. Tratémonos al nivel que somos. Y si lo desconocemos, estudiemos, practiquemos, conozcamos, escuchemos.

Un embarazo desde esta perspectiva es un momento de aprendizaje, adaptación,  crecimiento y sabiduría. Donde puedo ir preparándome para las necesidades que traerá el niño, porque ya las siento dentro de mi. Puedo ir conociendo sus cualidades de manera que me enfocaré en desarrollarlas. Puedo ir disolviendo las resistencias del árbol. Preparando el campo para mi bebé.

Es posible que leas todo esto y pienses, sí, claro y cómo lo hago?

Pues la buena noticia es que en el mundo somos muchos para que no tengamos que saber hacer todo.  Para que cada uno haga su parte y con ella ayude a los demás.  Ese sería el oficio, que no el trabajo, que cada uno deberíamos desempeñar. Así que si lo necesitas yo te acompaño.

Si ya estás en ese punto de sensibilidad espero que este escrito te de fuerza y apoye tu sentir para llevarlo a cabo

Si no estás en ninguno de los dos puntos quizá pueda generar en ti más respeto al lado de un embarazo.  En cualquier caso si lo permitimos, todo sirve para algo. Incluso si no crees en nada de esto quizá puedas aprovechar la oportunidad para ampliar un poquito tu mente.

Todo el tiempo tenemos la oportunidad de educarnos conscientes